UNA ÓPERA ROCK DE 1975

UNA ÓPERA ROCK DE 1975

En el año 1977 Asfalto firmaba 130 conciertos, su éxito era tan incuestionable como el desinterés de las discográficas en publicarles un disco, en fin, las discográficas se lo perdían porque Asfalto y TOPO siempre han sido unos señores grupos.

Una noche volvían de un bolo de Almazán (Soria) y José Luis Jiménez les cuenta una historia que se le había ocurrido.

En la que un individuo tiene una experiencia, onírica o inducida, en la que viaja a lugares donde se reflejan sus anhelos y sus miedos de una manera, digamos que abstracta, (palabras de Julio Castejon).

Julio contándo:
Lo hace a lomos de Rocinante que, abandonado en el cosmos, viaja triste sabiendo que los sueños de su dueño han quedado sepultados por el sentido práctico de la vida.

En ese viaje conoce "La Isla del Amor" pero también "Abélica" tema este que aparece en el primer disco de Topo, en la cara "B" del de Asfalto está reflejada "La Huida/Quiero irme" que es la obertura de la ópera rock".

José Luis Jiménez que el mismo, nos remite a un escrito que él mismo publicó en una red social de Topo. Cada escrito que publica José Luis Jiménez es una delicia por lo bien que escribe y un documento impagable por lo que cuenta.

Un extracto de aquel escrito:
"Hace 40 años de la salida al mercado del primer LP de ASFALTO Nota: - (recordad que lo publicó en 2018, ya son 43 años), el grupo que yo había formado en 1972. Varios músicos pasaron por allí, dejando su huella y en enero de 1975, es cuando este disco empezó a fraguarse, cuando Julio, Enrique, Lele y yo, nos convertimos en una banda con ilusión, ideas, justo en el momento que los vientos de libertad empezaban a soplar en este país. Fue una época inolvidable y que nos permitió, junto con otros grupos, crear la auténtica movida musical, madrileña y nacional.

Éramos muchos grupos los que empujábamos y un montón de nombres, que ahora no voy a citar. Todos grandes músicos, con nuevas ideas, que sirvieron de germen para lo que vino después.

Todos nosotros pusimos la música de fondo a lo que ocurría, pasar de una dictadura a un enorme cambio y aunque ahora parezca un eslogan político, es lo que se consiguió en aquellos días.

Con mucho esfuerzo e ilusiones, anduvimos el camino, nos pateamos el país de arriba abajo, tocando unas canciones que llegaban a la gente y consiguiendo en esa época mucho éxito, llenando locales y locales, gracias al boca a boca, porque era imposible conseguir una compañía de discos y tan solo habíamos grabado un disco de versiones de Los Beatles, que se vendían en las gasolineras en cintas de casette. No figuraba el nombre del grupo, sólo "Versiones de los Beatles" y los intérpretes eran: Rick Cajide, Lele Laina, Julio Cast y Joe Jiménez, para despistar….

Conseguimos la plena dedicación a ASFALTO tocando música creada por nosotros mismos en los bajos de la carnicería de la Sra. Aniana, en Carabanchel, junto al Campo de la Mina.

Entonces, como no conseguíamos grabar, se me ocurrió que quizá contando una historia a modo de musical, tal como habían hecho THE WHO (Nota.- Se atribuye a The Who y su disco "Tommy" (1969)  la primera ópera rock pero la primera ópera rock de la historia fue "S.F. Sorrow" (1968) de The Pretty Things)   PINK FLOYD y otros , que cada capítulo fuera una canción, tendríamos más posibilidades y esto que escribí entonces es lo que quiero enseñaros, que sirvió como idea preliminar para algunas de las canciones del primer disco de ASFALTO y luego también de TOPO.

Hubo una compañía de discos, ZAFIRO, que, a través de Vicente Romero, se interesó por el grupo y Vicente creó el sello CHAPA, junto con Luis Soler. El nombre de CHAPA lo decidieron en plena grabación del disco ya que la primera producción de este sello fue ASFALTO y grabamos en los estudios Audiofilm en otoño del 77.

El disco se grabó en 40 horas, a toda leche, todo valía y cuando oímos el resultado a ninguno nos gustó nada, sobre todo las mezclas y este fue el principio de la disolución de ASFALTO.

Bueno no quiero liarme. Ahora lo que me gustaría es mandaros este manuscrito, una especie de cuento de viaje astral (de moda en esa época) del que salieron canciones como "Quiero Irme", "La Huida", "Rocinante", "La Isla del Amor", en ASFALTO y luego en TOPO, "La Catedral", "Ciudad de Músicos", "País de los jefes", etc. También manuscritos de cómo compuse "El Capitán Trueno", "El Ser Urbano" y si encuentro algo más, ya os lo mandaré.

Como remate final, Julio recuerda este extracto de su libro "Ahora que me acuerdo" (también os lo recomiendo encarecidamente, si os decía que José Luis es una delicia como escritor, Julio no se queda a la zaga ni mucho menos). Os copio ese extracto:

"La verdad es que estábamos un tanto cansados de los temas del repertorio clásico y tan sólo decidimos rescatar dos: "Ya Está Bien" y "Días de Escuela", el resto del álbum quedaría incorporado con: "La Huida/Quiero Irme" "Rocinante" y la "Isla del Amor", aun sabiendo que, con ello, estábamos aparcando el proyecto de la ópera rock. Igual no eran temas suficientes y en lugar de echar mano de algún otro del viejo repertorio, hablamos de aportar nuevas ideas. José Luis vino con "Ser Urbano" y "Capitán Trueno", Lele trajo "El Emigrante" y yo aporté "Todos los Días". En realidad, se trataba de cuatro temas sencillos que no habían nacido en el local de ensayo, como los demás, es decir: provenían de cada uno de nosotros por separado y en ellos, a mi juicio, había poco de todo lo que éramos capaces de hacer cuando creábamos coralmente.

Pero, no había tiempo que perder y definitivamente así se completaría el disco.

Para evitar disputas, decidimos que los cuatro firmaríamos la autoría en forma compartida del conjunto de los temas del disco.

En noviembre de 1977 entramos en el estudio. En esta ocasión lo hacíamos en el estudio "A" de Audiofilm, el reservado para las grandes producciones. La cosa por ahí empezaba bien. Sin embargo, el técnico que se responsabilizaría de la grabación: Santiago Lardies, era más bien inexperto en materia de producción musical; si a eso unimos que nuestro productor, Vicente Romero, que hasta entonces nada había tenido que ver con cometido similar, la cosa ya no pintaba tan y no tardamos mucho en comprobarlo. De entrada, la Compañía había presupuestado hasta un máximo de 40 horas de grabación

—en el peor de los casos jamás he llegado a grabar un disco en menos de 100, pero lo normal suele ser emplear bastante más tiempo—Aquello nos hacía ir a matacaballo y claro, las tensiones comenzaron a hacerse patentes. Cualquier recording era dado por bueno a la primera o segunda toma.

Cualquier imperfección quedaba postergada para corregir en "mezclas" —se nos decía—, pero lo cierto es que eso no sería jamás así; es más, en mezclas, aún destrozaron más el resultado. Tal era el nivel de despiste que llegado el lead se aprecia como sube el volumen de la guitarra de acompañamiento…

Todavía recuerdo la cara que se nos quedó aquella mañana que nos citaron en el estudio de Zafiro para ir a escuchar el máster —las mezclas se hicieron sin nuestra presencia—. La desolación fue tremenda. Habíamos trabajado por años para ahora ofrecer discográficamente un trabajo tan deficiente. Creo que, justo aquel momento, fue el punto de inflexión a partir del cual se aceleró la ruptura y digo se aceleró porque, acontecida la ruptura, llegué a la conclusión de que el cisma se llevaba gestando desde meses previos"

¿Una ópera rock? Efectivamente, Asfalto empezaba a gestar una ópera rock de la que todos conocemos "Rocinante" pero casi nadie conoce esta historia.

Sin embrago, lo que hasta entonces había sido desinterés, de repente (es el destino del músico) son prisas. Tenía que nacer el sello Chapa y había que publicar un disco ¡ya!  El grupo no tiene acabado ese trabajo y mezcla temas que venía tocando en su repertorio ("Días de escuela" "Ya está bien") con temas (posiblemente sin rematar) de lo que sería esa ópera rock y temas que no eran de esa ópera rock pero que aún no estaba en su repertorio ("Capitán Trueno", "Ser urbano", "Todos los días" y "El emigrante").

Lo cierto es que el disco gustó, gustó mucho, pero había alguien que no estaba satisfecho.

El grupo. ¿Fue este el detonante que precipitó la separación de los Asfalto del 78? Es más que posible, tanto José Luis Jiménez como Julio Castejón, lo apuntan como causa. Son las paradojas de la historia. Su disco supuso el nacimiento del sello que sirvió para el despegue de todo el rock estatal, pero, posiblemente, también la pérdida de un grupo con una calidad impresionante (bien es cierto que Asfalto siguió y que apareció Topo y ambos han escrito páginas de oro en nuestra historia) y tal vez, la pérdida para siempre de lo que podría haber sido la primera ópera rock en España y en castellano y que, a juzgar por la calidad de los temas que hemos ido conociendo, hubiese sido una obra maestra.

Voy a ser preciso en la historia porque me gusta que todo quede bien contado, es cierto que, en Cataluña, en el 76, se publica el disco "Granja Animal" disco que se anuncia como la Primera ópera rock en Català y también es cierto que, en Argentina, en el 71, Vox Dei publica "La Biblia" posiblemente, la primera ópera rock en castellano.

Ninguno de esos discos contradice lo que comento, que, de haber nacido en el 77 ó 78 el disco que un día José Luis Jiménez (aunque si releéis su escrito veréis que se gestó en el 75) contó a sus compañeros de grupo volviendo de un bolo en Almazán, hubiésemos estado ante la primera ópera rock hecha en España en castellano y ahora que he sido preciso, voy a soñar…

¿Estamos a tiempo? ¿Podrían juntarse a componer aquellos Asfalto (imprescindibles) junto a musicazos que años después fueron Asfalto o Topo y terminar esa ópera rock? Creo que sería recibida con mucho entusiasmo por todo el rockerío de habla hispana… sueña, sueña, hasta que tus sueños se hagan realidad.

Nota: - Queda una pieza suelta. José Luis Jiménez habla de un tema "Pais de los jefes" que no aparece en ninguna grabación de Topo ¿estamos ante un tema inédito? Es un tema que tiene escrito y aun no ha utilizado? ¿Es una idea para un tema que aun no ha desarrollado?

Muchísimas gracias a Julio Castejón y a José Luis Jiménez, por contarnos todo esto, que quede para la historia.

LA HISTORIA NOS DEBE UNA ÓPERA ROCK....